martes, 12 de mayo de 2015

¡Cómo voy a adquirir experiencia si no me han dejado empezar!

Por: Juan Pablo Molina Arango
Estudiante de Mercadeo y Publicidad
Cursando la materia "Desarrollo de Competencias Empresariales"
Fundación Universitaria Autónoma de las Américas



“¿A que empresa va a enviar la hoja de vida?” “¿Ya sabe dónde va a hacer las prácticas? “¿Va a ser un desempleado más de éste país?”, este tipo de preguntas y comentarios escucho de amigos y familiares, seguro no soy el único estudiante de último semestre en Medellín que lo hace, a muchos puede que nos “preocupe” esto, porque es una nueva etapa, porque con ello vienen más responsabilidades, etapa que trae cambios que debemos saber llevar, para muchos puede que sea nuestro primer acercamiento en el mundo laboral, por eso viene la “preocupación” y más cuando se debe ir a una entrevista, donde siendo muy de buenas nos tocará con alguien buena “papa”, que no nos someterá a algún tipo de presión extraña y hará que los nervios suban al tope máximo, siendo el caso contrario, donde de entrada supone uno que el entrevistador hace que el ambiente esté tenso por cualquier circunstancia ajena que desconocemos y no nos permita desenvolvernos de una manera adecuada y poder demostrar lo que sabemos, pasando por esto una, dos, tres, cuatro veces, hasta que en alguno de los intentos podamos avanzar al siguiente filtro y lograr conseguir las prácticas para así graduarse de la universidad, pero no es solamente esto, tal vez en las universidades no nos preparan para lo que realmente es la vida laboral, la educación no es mala, pero creo que debería de ser más práctica, realizar un taller de 30 preguntas sobre un tema que vimos en una clase, creo que no nos va a ayudar para lo que verdaderamente debemos hacer en un puesto de trabajo.

Ahora, lo que más preocupa es que después de las prácticas, si la política de la empresa lo permite puede que lo dejen en el puesto, si no, quedar sin empleo y pasar por el anterior procedimiento una y otra vez, donde las empresas ahora piden experiencia en una cantidad de años más alta de los que uno mismo tiene, pero exigiendo que el postulante sea joven y a veces con una cantidad de títulos impresionantes, para ganar simplemente un salario mínimo que alcanzará para los pasajes del mes y una que otra comida, porque lo único que sube es eso, los pasajes, la comida, servicios, etc.; aquí es el momento como muchos anteriores, porque con amigos y primos ha sido así, donde nos hacemos la misma pregunta como usted profesor, ¿Cómo voy a adquirir experiencia si no me han dejado empezar? Muy buen cuestionamiento, al cual no le he encontrado respuesta y por lo pronto no lo haré, porque con la lógica que manejan las empresas es imposible hacerlo.

Estudiar lo que nos gusta (en la mayoría de los casos) en una universidad, sea pública o privada nos lleva tres, cuatro o cinco años, tiempo lleno de traspiés, trasnochos, tal vez materias perdidas, alegrías y tristezas, para salir a ejercer felices y demostrar lo que aprendimos (pensarán muchos que es así) pero al salir al mundo real y comenzar con los procedimientos mencionados anteriormente (regar hojas de vida por toda parte, asistir a una y mil entrevistas) y darse cuenta que no todo es tan fácil, que van a elegir a alguien por encima de nosotros, sea porque tiene “rosca” o en algunos casos con menos capacidades y aptitudes pero MÁS JOVEN ¿Más joven? SI, porque no se gastó los tres, cuatro o cinco años en una universidad, tal vez porque no tenía los recursos económicos para realizar una carrera en una universidad o porque quiso irse por el camino más rápido, 6 meses o menos de un año en el SENA, realizando una técnica y ya, estudió, sale al mundo laboral con 18 o 19 años y estos en la mayoría de los casos son los que contrata la empresa, los otros que pasamos esos años preparándonos en la universidad, quedamos mirando para el techo, pensando qué vamos a hacer para poder conseguir un empleo, para mí es falta de igualdad y no sé si lo que hace el SENA está bien o no, es una institución emblemática del país, pero de la calidad de enseñanza no soy yo quien pueda hablar, ya que no he recibido cursos o estudios por parte de ellos, si es tan bueno como dicen, pueden preparar a sus pupilos en el mismo tiempo que una universidad y hasta quizás salgan mejor preparados y se convierta en la mejor institución del país por su calidad de enseñanza y estudiantes.

Cuando se está próximo a salir de la universidad, de terminar el pregrado, en mi caso, deseo seguir estudiando, seguir aprendiendo esto que tanto me gusta, pero darse cuenta que ahora la industria no toma en cuenta un posgrado, una maestría, porque no van a “tener” con que pagar el salario que se merece un doctor o un magíster, desmoraliza y bastante, dado que dicho salario lo pueden dividir entre los egresados del SENA y los ponen a cumplir entre todos las funciones que podría hacer una sola persona; por eso es que hay tantos emprendedores, o al menos intentan serlo, porque no a todos les funciona el proyecto, sea por falta de ayuda, porque se le acabó el dinero para invertir o porque simplemente su idea no funcionó como deseaba, pero con todo esto, es más grande las ganas de aprender, de seguir hacia adelante que el sentimiento desmoralizador gracias a las organizaciones, a las crisis, al Estado, al Presidente, a quien sea que haga que las cosas sean así para algunos; también porque algunas empresas se fijan en el establecimiento de donde se graduó, cuál tiene más prestigio y cuál no, cosa que me parece injusta ya que la Ciudad tiene muy buenas universidades y excelentes profesores en todas las instituciones, muy bien preparados.

Por allá en 2010 andaba en grado undécimo en el colegio, en ese entonces una muy buena institución, teniendo el estudiante que ocupó el primer lugar en las pruebas ICFES, subiendo el nivel del Colegio y si no estoy mal, por ese tiempo se escuchaba hablar de aumentar dos grados más el bachillerato, idea descabellada pensábamos todos, porque lo único que queríamos era salir, aunque un poco contradictorio porque nos gustaba mucho el colegio, ahora más grande, quizás más maduro, cinco años después de aquel tiempo, no me parece tan descabellada la propuesta, me parece una muy buen planteamiento para salvar el mercado laboral, también para orientar a los estudiantes, para educarlos y enseñarles más, porque muchos por no decir la mayoría, salimos del grado once y no sabemos qué estudiar, nos quedamos “vagando” y perdiendo el tiempo, porque no encontramos algo que nos guste, uno o dos años hasta descubrir lo que en realidad nos apasiona, como en mi caso que dos año y medio después descubrí lo que quería estudiar, después de haber pasado un semestre por la Universidad de Antioquia, así que aumentar dos grados más podría servir, si tal vez se enfocaran en eso, en orientar a los bachilleres para que puedan elegir sabiamente lo que van a hacer por el resto de sus días, para que encuentren algo de que enamorarse y realicen todo así, con amor, porque cuando se hace lo que realmente se quiere, jamás se convierte en obligación.

El SENA con los colegios tiene una “alianza”, por así decirlo, donde desde el grado décimo se comienza con una media técnica, en donde yo estudiaba era sobre salud, razón por la que no la hice, pero compañeros que la realizaron ahora tienen buenos cargos solo con esta media técnica, por ejemplo uno de ellos es Gerente de dos IPS, solo con realizarla, por esta razón muchas personas solo hacen este tipo de estudios, no sé si esto sea del todo bueno o no, porque pueden tener muy buenos cargos, pero no estudian más, se quedan con eso, no estoy seguro si esta es la idea de una “Ciudad más educada”.

Retomando la época del colegio, tenía una profesora con más de cinco jubilaciones encima, ganándose un salario estratosférico y dando tres materias, era la más cansona de todas, pero no se le puede quitar lo buena que era enseñando, cuento esto, porque seguro no era en el único lugar que pasaba, adquieren una jubilación tras otra, empiezan a recibir pensión y siguen laborando, un poco absurdo, o simplemente no tienen nada más para hacer, porque le dedicaron alma, vida y corazón a eso que hacen y no quisieron hacer nada más o simplemente podría ser que solo les interesa el dinero por razones que desconozco, pero debería de ser distinto, una jubilación y se van a viajar, a conocer, a dormir, que sé yo, a disfrutar la vida que les queda y su dinero que con tanto esfuerzo y dedicación se ganaron durante tanto tiempo, esto sucede tanto en el ámbito educativo como empresarial, tanto con cargos muy altos como bajos, quitándole oportunidades a las personas más jóvenes que venimos detrás, habiendo estudiado tantos años, aspirando ¿Por qué no? a subir cargo por cargo, recorrer y conocer la empresa de abajo hacia arriba hasta tener uno de esos cargos tan altos y prestigiosos que hay en ellas, si no desean sacar a los jubilados de una y sin aviso, se puede hacer por ejemplo que estos, empiecen a asesorar, a guiar a los más jóvenes en los cargos que antes ocupaban, que los instruyan, que les enseñen lo más que se pueda y ahí si los pueden excluir de sus obligaciones y los manden para la casa, para un retiro espiritual o vacaciones permanentes.

¿Colombia, la más educada?

Por: Catherine Múnera Echeverri
Estudiante de Hotelería y Turismo
Cursando la materia "Desarrollo de Competencias Empresariales"
Fundación Universitaria Autónoma de las Américas

“La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo. La educación es el gran motor del desarrollo personal. Es a través de la educación que la hija de un campesino puede llegar a ser médico, que el hijo de un minero puede llegar a ser cabeza de la mina, que el descendiente de unos labriegos puede llegar a ser el presidente de una gran nación. No es lo que nos viene dado, sino la capacidad de valorar lo mejor que tenemos lo que distingue a una persona de otra.” Nelson Mandela, ex Presidente de Sudáfrica y Premio Nobel de Paz.

Anteriormente cuando se iba a la escuela nos vendía la idea, de que si estudiábamos mucho y sacábamos buenas notas, más adelante podrías obtener un título universitario, y así conseguir un empleo bien remunerado. Con el paso del tiempo, nos hemos dado cuenta que la situación es muy diferente, tener un título profesional no es garantía de nada.

Anteriormente solo tenían derecho al estudio las personas con un gran poder adquisitivo, ya que no había instituciones públicas, solamente privadas. Con la declaración de los derechos del hombre escritos por Antonio Nariño empezaron a surgir algunos cambios. Se pensó en la idea de hacer pública la Educación, se trataba de pagar ésta con los impuestos del pueblo, obviamente a las personas adineradas no les gustó para nada la idea, pues pensaban que un campesino, o un niño pobre de la calle no podía aprender a leer y mucho menos a escribir, “eran brutos".

Al hacer varias investigaciones se dieron cuenta de que si era posible, ya que todos tenemos la misma capacidad académica, pero aún en la actualidad sigue muy arraigado el paradigma de pobre y rico, en la educación actual se puede evidenciar la economía y la inteligencia como dos pilares interdependientes.

Existen algunas personas que se han beneficiado de la economía de la educación, pero la gran mayoría, no. El poder que han adquirido estas personas les da el derecho de hacer con la educación lo que a ellos más les convenga, ¿Y qué es lo que a ellos más les conviene? Que no se aprenda lo necesario, que no se tenga el conocimiento requerido para juzgar las acciones de ellos, que no seamos capaces de defendernos, y que siempre estemos dispuestos a agachar la cabeza.

Con respecto a los maestros, podemos decir que es una de las profesiones más importantes, pues son ellos los que nos forman para el futuro, sin embargo son muy mal remunerados, si lo comparamos con Finlandia uno de los países con la mejor educación en el ámbito mundial por ocupar los primeros lugares en las pruebas PISA, un profesor gana aproximadamente  entre 30.000 y 45.000 euros lo que equivale a pesos colombianos a 80.140.836 una cifra desproporcional con el salario que se recibe en Colombia, pues el máximo salario de un profesor es de 2.000.000 de pesos. Ya pueden sacar ustedes sus propias conclusiones.

Por otro lado, la preparación que reciben nuestros maestros no es la mejor, anteriormente se debía terminar en una Normal para obtener el título de maestro (pedagogo), y luego cada uno se iba especializando en su tema de preferencia, lo que ayudaba a subir de escalafón, y obviamente su sueldo. Actualmente, cualquier profesional puede ser profesor, solo necesita especializarse en alguna materia. Sin desmeritar la función de ninguno, muchos de estos profesores, por mucha teoría que tenga, no tienen la pedagogía necesaria para transmitir esa información, y se quedan cortos a la hora de aplicar disciplina a un grupo. 

Al mismo tiempo están dotando las intuiciones educativas de material didáctico, tales como computadores, tabletas, salones inteligentes, cámaras fotográficas, video beam; muy buen proyecto, pero ¿Si se la da utilidad que merecen? ¿Están los profesores capacitados para manejar todo ese material? ¿Están los estudiantes preparados para aprender por medio de esas herramientas? Preguntas como éstas son las que nos debemos hacer antes de felicitar al gobierno por su buena labor de transformar la educación por medio de la tecnología. Todo eso se ha convertido en una excusa para tapar el sol con un dedo. 

Cuando entramos al primer grado de toda nuestra vida escolar, nuestra imaginación es sorprendente, como niños nos imaginamos cosas maravillosas, nuestra mente está abierta a todas las posibilidades y respuestas para solucionar un problema. A medida que vamos avanzando de grado, nuestra mente se va limitando, ya no tenemos la misma capacidad de imaginación, porque nos han metido en la cabeza que solo existe lo que hay, si piensas o te imaginas algo fuera de lo común, eres un loco, tienes problemas psicológicos y necesitas asesorías de un psicólogo, esto se da porque la educación es un paradigma, está estructurada en base a un modelo en el cual solo se aprende lo que nos enseñan, como si  poner a trabajar nuestra imaginación fuera un delito, se debería de poner más atención a esta situación, pues en nuestra Constitución en el artículo 44 se habla de la educación como un derecho fundamental que tiene cada niño.

Por si fuera poco lo mencionado anteriormente, hoy nos ataca el virus más peligroso que ha existido en los últimos años, la tecnología, vivimos en una constante guerra, en un periodo estimulante, donde no queremos que ésta nos consuma, pero al parecer el efecto es el contrario. El niño de hoy es atacado por los computadores, celulares, video juegos, tabletas, y un montón de canales de televisión, a los cuales debe de responder de manera asertiva, como podemos ver se maneja un sin número de información, la cual no existía tiempo atrás.

Esto puede ser primordial a la hora de asistir a un colegio, la mente está ubicada en otro lugar, y  queda muy difícil pensar, lo que nos vuelve cada vez un poco más perezosos. La situación mencionada no importa para nada, pues se está cumpliendo con el objetivo de los altos mandos, el interés de la industria prevalece sobre esto.

Para dicha de estas personas y para desgracia del pueblo, en Colombia hay según datos del Gobierno 1.672.915 personas analfabetas, con esta población se podría llenar aproximadamente cuatro estadios como el Campín en Bogotá, la mayoría de estas personas se encuentran ubicadas en el campo, y en la Constitución colombiana en el artículo 64 se dice que es deber del estado promover el acceso progresivo a los servicios de educación, entro otros, con el fin de mejorar el ingreso y calidad de vida de los campesinos.

Otra cifra interesante que muestra el Gobierno es la de los 700.000 bachilleres que se gradúan al año, eso sí, sin saber el grado de conocimiento, y sin juzgar a ninguno por sus notas finales. La mayoría salen con un futuro incierto, sin saber qué van a estudiar o muchas veces sin recursos económicos para hacerlo. 

Es allí donde el SENA, saca provecho de la situación, por así decirlo,  para reclutar jóvenes y prepararlos para ofrecer al mercado una mano de obra barata, que necesita la industria. Por esto les ofrecen a estos bachilleres sin recursos y sin una orientación definida, programas de toda clase, sin costo alguno, y con una duración que a cualquier persona le llama la atención, pues el tiempo para graduarse como técnico o tecnólogo es reducido, y en muchas ocasiones estas personas salen con un puesto de trabajo definido, en el que el salario es deshonroso y el cargo requiere de un esfuerzo máximo, altas horas de trabajo, varias actividades a realizar, acciones que ni siquiera están comprendidas en el contrato, pero lo importante es que les pagan.

Para una persona de bajos recursos es muy difícil negarse a trabajar por un salario mínimo, que le alcanza a duras penas para sostener su familia y sacarla adelante, lo importante para ella es que puede subsistir. Pero por el contrario es muy desmotivador para una persona que estudió una carrera durante cinco años,  y al graduarse tiene que salir a trabajar por un sueldo tan mísero como el que le pagan a la persona del primer caso. En muchas ocasiones no queda otra alternativa que tomar el cargo por el sueldo mínimo, pues la respuesta que da la empresa es: Si le sirve así, bienvenida sea, sino tranquila que si hay personas que de verdad quieren trabajar. Al mismo tiempo la compañía se alaga, al fin y al cabo está contratando a una persona del SENA, está colaborando con una labor social del Gobierno. Lo que no se sabe es que esa empresa lo está haciendo es para beneficio propio, solo está cumpliendo con una responsabilidad social impuesta por el Estado.

Pero no todo es malo, se puede observar desde otro punto de vista, el SENA, está encargada de ayudar a las personas de bajos recursos muchas veces dándole la oportunidad de que empiecen la preparación desde el grado noveno en el colegio, para cuando se gradúen sigan con su preparación en el instituto y salgan con el título de tecnólogos o técnico, el SENA se enfoca como lo mencioné anteriormente en preparar personas para la vida laboral, vinculado con las necesidades del mercado, un punto muy importante, pues la mayoría de personas, después de que nos graduamos nos pasamos el resto de nuestra vida trabajando. Al preparar a estas personas para la vida laboral, las hacen personas competentes y capaces de crear soluciones ante distintos problemas. 

Nuestro país está pasando por un alto grado de desempleo, lo que quiere lograr el SENA es combatir este problema, generando empleo para las personas más jóvenes por medio de convenios que tienen con varias empresas. El SENA, además brinda la oportunidad de crear la empresa propia con un proyecto que se llama Emprender, otra ventaja que ofrece son los múltiples programas de formación con cursos virtuales lo que brinda una cobertura en toda Colombia.

El SENA siendo una entidad del Estado, sustentada en principios educativos debería presionar al Gobierno para acabar con la pereza social que ella misma difunde,  al considerar subsidios para las personas más pobres, en lugar de pensar en empresas auto sostenibles, en las que solo estas personas de bajos recursos puedan trabajar. El SENA también debería valorizar y cuantificar el empleo de sus egresados y así darle oportunidad a los demás personas con educación superior.

Pienso que para que la Educación en Colombia mejore deberían de enfocarse menos en un solo problema como lo es la paz, sabiendo que hay muchos sectores flagelados como la salud, sector transporte, el agro, y obviamente la educación, que deberían ser base  para un estado como Colombia, donde la riqueza natural abunda. Debemos implementar lo más sencillo y difícil en una sociedad, como lo es la ética, la moral y el respeto, para que no haya problemas de gobierno, de pobreza, y por ende de educación. 

Subsidiar el 100% de la educación en los colegios públicos y en las universidades, donde se incluyan todos los jóvenes, el hecho de subsidiar dichas instituciones no  quiere decir que la calidad de la educación desmejore, por el contrario se debe  estar pensando cómo mejorarla cada vez más y qué herramientas o qué métodos utilizar para la mejora continua de ésta.

viernes, 8 de mayo de 2015

Jugando al escondrijo con el empleo en Colombia

Por: Jhon Anderson Hoyos Durango
Estudiante de Mercadeo y Publicidad
Cursando la materia "Desarrollo de Competencias Empresariales"
Fundación Universitaria Autónoma de las Américas



Con el pasar de los años para los jóvenes colombianos se ha hecho muy difícil aspirar a un trabajo digno, puesto que muchas compañías entre sus muchos requisitos exige tener experiencia laboral de mínimo un año, y la práctica profesional es de solo seis meses, entonces cómo poder tener una buena experiencia si dichas compañías no brindan la oportunidad para conseguirla. Con esta situación la única experiencia que están obteniendo los jóvenes es la de hacer hojas de vida, llenar formularios, presentar entrevistas de trabajo, llenar las pruebas psicotécnicas, etc.

También estas mismas han adquirido ciertos niveles de exigencia considerables,  para elegir a los nuevos candidatos que ocuparán diferentes cargos, y que además, se medirán por una productividad invisible, que finalmente se verá recompensada con un salario que no compensa el esfuerzo del trabajador, y comparando los egresos que se realizan en un país como Colombia, que gastos indispensables como la alimentación, la educación, el vestido, la vivienda, el pasaje del bus, entre otros, cada vez aumentan más y el salario no hace mejoras positivas, es muy desalentador saber que si logramos pasar todas estas exigencias, nuestras necesidades no serán cubiertas al ciento por ciento, y como para completar la situación muchas entidades solo buscan trabajadores por tiempo temporal, y a estos solo les reconocen el salario mínimo y algunas de las prestaciones sociales, ya sea, el servicio de Salud, Pensión, ARL, POS, servicios complementarios, establecidos en la Ley 100 de 1993, y no sobra resaltar que el deber de esas compañías, es brindarles todos estos  beneficios a sus empleados. “Entonces esta obligación queda suspendida en el aire”.

A pesar de que los derechos de los aspirantes, a la empleabilidad y contar con un salario que compense su fuerza de trabajo, no están siendo respetados en su totalidad, la necesidad los obliga a aceptarlo y dicho de una manera muy grotesca estarían siendo explotados por estas empresas prestadoras de servicio. Las prestaciones sociales y el salario pueden variar dependiendo de su modo de contrato sea por tiempo definido o temporal, cargo y experiencia.

Por otro lado, estos aspirantes a empleos dignos, se encuentran con el pequeño obstáculo de que los graduados del SENA (Servicio Nacional de Aprendizaje) tienen un privilegio ante la contratación en las empresas, ya que ellos cuentan con el apoyo del Gobierno Nacional. Para muchos el servicio que presta el SENA es un gran problema para poder avanzar laboralmente, porque fuera de que el tiempo que permanece estudiando en una universidad es de dos años o más, los gastos que esto genera son elevados.

Ahora le volteamos la cara a la moneda y encontramos a todas aquellas personas que igual que todos sueñan con tener un trabajo digno, honrado, posiblemente bien pagado, pero por su situación económica les queda muy complicado realizar una carrera técnica y profesional para conseguirle. Es ahí cuando ellos se encuentran con el Servicio Nacional de Aprendizaje SENA,  una institución pública colombiana encargada de la enseñanza de programas técnicos y tecnológicos, fundada en el año 1957 por Rodolfo Martínez Tono, quien se inspiró en el SENAI (Servicio Nacional de Aprendizaje Industrial) del Brasil.

El SENA cuenta con varias sedes en los 32 departamentos que componen este país, también tiene convenio con muchas entidades públicas importantes en el país, y consolida algunos convenios en el exterior. Gracias a esta Institución se les ha permitido a muchos jóvenes de escasos recursos formarse y salir a conseguir  una oportunidad en cualquier organización.

Aunque el servicio que presta el SENA para unos es bueno y para otros no tanto, queda la incógnita de si el funcionamiento y la estrategia de éste es la más apropiada, puesto que prepara a sus técnicos y tecnólogos en tan solo 6 meses o un año y  la mayoría de sus alumnos están graduándose de 18 0 19 años de edad y salen a competir en el ámbito laboral; será que con esta formación en tiempo récord, estos jóvenes tienen la capacidad para salir y ser un apoyo viable para las empresas.

Si analizamos esto entonces podríamos llegar a la conclusión de que los más capacitados para desempeñarse en cualquier trabajo son los egresados de otra clase de institución, puesto que su formación fue de un tiempo más extendido, y si es de tiempo más extendido, esta persona quizá tenga más conocimientos que la de una persona graduada en el SENA o tal vez no más conocimientos, si no que los que obtuvo en el proceso de su formación fueron profundizados de una manera más avanzada; y por ello la labor que prestaría además de ser un beneficio para sí mismo, le estaría ayudando a esa empresa a crecer; porque cuenta con un personal muy bien capacitado.

Aunque  cabe resaltar que en los últimos años surgió la propuesta de crear el grado décimo segundo y hasta décimo tercero en la Educación Básica Secundaria; ésta sería una novedosa estrategia para retener a los alumnos que están egresando de temprana edad de su estudio de bachiller académico, y también para prepararlos más en comprensión lectora y lógica, escritura, gramática, ortografía y emprendimiento, serian años dedicados en enfocarlos más hacia su verdadera vocación profesional.

Si los egresados del SENA u otra institución, quieren afianzar sus conocimientos y posiblemente realizar un posgrado, se podría decir que en el ámbito personal está creciendo de una manera exorbitante; pero este conocimiento solo le serviría principalmente para ser docente universitario. Para cualquier empresa no es que sea muy conveniente tener a una persona que cuente  con un posgrado en su hoja de vida, no solo porque “no cuentan” con la rentabilidad necesaria para ofrecer una buena compensación a estos profesionales, si no también, porque hay doctores que son pésimos trabajadores y degeneran el sistema; de allí aparece el dicho: “Estudiemos para ser docentes universitarios, porque a los magíster la academia nos quiere, pero la industria nos odia”.

Otro inconveniente que presentan los jóvenes aspirantes a mejor calidad de vida, mejor empleo; es la cantidad de cupos de empleo, ocupados por personas ya jubiladas, que se están quedando anclados en sus cargos, estancando el mercado laboral y evitando que las nuevas generaciones de trabajadores puedan comenzar a adquirir la muy codiciada experiencia laboral, exigida por la gran mayoría de empresas colombianas, y poder emprender como líderes iniciando nuevos proyectos o por lo menos dirigir los ya establecidos. Lo más conveniente sería que alguna entidad con voz y voto sobre este tema, exigiera que los empleados ya jubilados por obligación se tengan que retirar de su cargo y permitir que los nuevos profesionales continúen su proceso.

Para amortiguar todo lo anterior el Ministerio de Trabajo, el Gobierno Nacional y las centrales sindicalistas, deberían empezar a regular el salario mínimo, aumentándolo, de manera que los gastos indispensables de la comunidad colombiana puedan ser cubiertos al ciento por ciento. Si no también que todos tenga derecho a un sueldo  acorde a su nivel de preparación.

martes, 5 de mayo de 2015

Lo de Parody es ceguera testicular

Por: Jorge Uribe Piedrahita
Comunicador Social /Organizacional
Periodista
Especialista en Mercadeo Gerencial
Docente Universitario
Líder Coach

FECODE es la Federación Colombiana de Educadores

"Señora Ministra: ¡No le tememos a la evaluación, ganamos el cargo aprobando un examen! ¿Usted cómo llegó? Nuestro puesto lo ganamos con intelecto ¡El suyo fue a dedo presidencial! ¡Respete al Magisterio! ¡Aquí le apostamos a la educación de calidad!", decía uno de los carteles que han utilizados los maestros de la Patria para reclamar sus derechos y exigir el cumplimiento de las promesas hechas por el Gobierno de Santos desde 2014; un Gobierno que se dedicó a prometerles a todos los sectores, pero al parecer, los superministros anotan todo en un libro invisible guardado en el mismo baúl en el que Santos deposita todo los logros presidenciales.

Como en toda manifestación por la búsqueda del respeto de los derechos de un selecto grupo, existen desinformación o desconocimiento, una sembrada por los medios de comunicación polarizados, que al parecer son dirigidos desde la Casa de Nariño y quieren hacer ver que lo de los profesores es un descontento por una tal evaluación para el ascenso que solo pueden aprobar el 20 por ciento de los docentes, porque está condicionada por el presupuesto, sin tener en cuenta los títulos de posgrados o maestrías. Aunque bueno, también es importante reconocer que hoy venden títulos de posgrados como empanadas en la calle y ya cualquiera hace seis semestres de Finanzas en la San Marino y sale a la calle a competir con profesionales buenos que "sudaron" su carrera, pero que el sistema y la famosa "palanca" no les permite evolucionar.

¿Qué está pasando con los maestros?

Es normal que la opinión pública se confunda, cuando ve salir a la "superministra" con luces por todas partes, porque si de algo sabe Gina María, es sobre la importancia de la publicidad en los cargos públicos, sobre todo cuando se acercan las electorales de 2018, y por supuesto, las de 2015. Parody d'Echeona se toma foto con cuanto negrito, blanquito, monito, bajito, altico, gordito, flaquito, montañerito, citadinito... se encuentra en la calle o colegios, cada vez que va a firmar, inaugurar, promover, instalar o hacer, llama a la prensa y espera a que el flash inunde su rostro politiquero y la saquen en prensa. Ella, sí, la misma que desde el Senado provocaba cuanta escena de romance, disputa, algarabía o bulla para sobreactuar y generar los llamados "golpes de opinión", a salido a plaza pública, con cinismo, ignorancia y un puñado de mentiras a hablar de los maestros. Pero bueno, tratemos el por qué del paro, qué pide FECODE (Federación Colombiana de Educadores); y qué exigen ellos para que los niños regresen a clases.

En primera instancia, quiero enviar un "regaño" a los medios de comunicación de Colombia: Cómo es posible que centren el problema en que los padres no tienen con quien dejar a sus hijos para ir a trabajar, como si la esencia de la Educación fuese servir de guardería y quitarle esta responsabilidad a los padres. La Educación debe ir más allá de cuidar niños ajenos. En vez de gastar dinero y planeación logística para hacer ese tipo de reportajes tan mediocres, en los que martirizan a los padres y prostituyen a la Educación, hagan un verdadero periodismo investigativo y visiten los colegios del país, especialmente los que se encuentran en zonas rurales, para que conozcan la verdadera situación que atormentan a la Educación en Colombia y el rol de los profesores en la formación de los niños. 

En segundo lugar, enviaré un "regaño" al Gobierno y al Ministerio de Educación Nacional, cómo es
posible que Gina María salga en medios de comunicación diciendo que no le pagará salario a los profesores manifestantes, cuando, constitucionalmente, existe el derecho a manifestarse pacíficamente. Cómo es posible que Parody quiera escudarse en los niños y adolescentes y afirma que los profesores no tienen derecho a salir a paro y exigir el reconocimiento de sus derechos. Es verdad, Gina María, los perjudicados son los estudiantes, pero si alguien tiene culpa en este proceso es usted y su jefe, pues si bien recuerda hace un año, ustedes llegaron a un acuerdo con FECODE, pero esos acuerdos quedaron en el baúl del olvido. También, respetada Ministra, 53 días antes de entrar a paro, la Federación le hizo llegar a su despacho, un pliego de peticiones que su merced, desde la silla en la que planea sus golpes publicitarios, ignoró totalmente. Por eso, Gina María, al agotar todos los recursos que la diplomacia tiene implícitos en su ser, los maestros, los mismos que educan al futuro de la humanidad, los mismos que no tienen responsabilidades de "nana de guardería", sino de forjadores de seres humanos íntegros; se vieron obligados a utilizar el mísero salario que el Gobierno les ofrece para comprar pancartas, marcadores y cartulinas, y salir por las calles a ejercer uno de sus derechos: Manifestarse pacíficamente; y eso, es simplemente para pedirle a usted, cachaquita, salud y un trato digno.

No se si preocuparme más por la forma cínica en la que sale la Ministra a decir que está afectada por los niños y que la atormenta que los del paro les estén violando el derecho a la Educación, sin embargo, a Gina María se le olvidan los más de 5 mil niños wayúu muertos por desnutrición, sin sumarle los cientos más del Chocó a quienes el Gobierno les olvidó y les está violando derechos fundamentales tan importantes como la alimentación, la vida y la Educación.

Gina María, terca por naturaleza, pero más que por naturaleza, terca para que la Publicidad la cobije, dice que no negocia con los docentes en paro, menospreciando a este gremio tan significativo y "bravo", que no le teme a nada. Es más, a ella como que no le tocó el Gobierno de Pastrana, cuando estuvieron en paro casi medio año. Ella, si ella, la protagonista de nuestra tele, se le olvidó que el Gobierno si negoció en paro con los cafeteros, con los paperos, con los transportadores, con la rama judicial y hasta con las FARC, que es peor aún, en un proceso de paz en el que ese grupo de narcoterroristas han aumentado sus ingresos exponencialmente por concepto de narcotráfico, siguen reclutando a menores, inundando de minas el territorio nacional y masacrando a los héroes de la Patria.

Hablemos de los salarios

Según un estudio de la Fundación Compartir, los docentes oficiales ganan 28 por ciento menos que
el resto de profesionales. El mismo Juan Manuel y Gina María, lo han reconocido en varias oportunidades, sin embargo, no hacen nada para solucionar la problemática. Más del 80 por ciento de los profesores, muchos de ellos con especializaciones y maestrías, devengan un promedio de 1.678.981 pesos que con deducciones legales para pensión y salud, quedaría en 1.400.000, frente a los 2.678.638 pesos de otros profesionales que laboran con el Estado, lo que profundiza la inequidad, la injusticia y la desigualdad, sobre todo cuando hablamos de la DOCENCIA, un ejercicio puro y bello que tiene bajo su mano, la más difícil de las responsabilidades: Formar al futuro de la sociedad.

Gina María salió en medios a decir, ¡ah! porque ella todo lo hace a través de los medios, para ella es un error y casi un martirio, tener que sentarse con los representantes de FECODE para negociar este importante proceso; ella prefiere convocar a ruedas de prensa, pedir maquillaje y explorar su cerebro con las luces y el flash; ella dijo que les ofrecía un aumento del 10 por ciento como ajuste salarial, sin embargo, no es inmediato, sino que se tomaran este resto de Gobierno y dejarán que se convierta en una consigna electoral para las presidenciales de 2018, porque un aumento de 2,5 por ciento anual por cuatro años, va a llevar a que esa promesa quede en el baúl, en el que Santos guarda todo lo que no le interesa ni hará en su segundo mandato.

Los que están a favor del Gobierno, dicen que un docente apenas trabaja seis horas, menos que todos los trabajadores estatales, pero permítanme decirles, que es completamente falso. El profesor hace seis horas de clase diarias en las aulas con los estudiantes, sí, es verdad... pero debe buscar un espacio y un tiempo para capacitarse, investigar y preparar sus clases, realizar la planeación semanal y mensual, redactar los logros de cada periodo académico, corregir trabajos y evaluaciones, sacar notas, subirlas al sistema, diseñar los exámenes de recuperación, participar de los proyectos transversales de ley y realizar las acciones para ejecutarlos, asistir a reuniones de comités, responder a inquietudes de padres y recibirlos, darle tutorías a los estudiantes, entregar los boletines de calificaciones, planear los actos cívicos, llevarlos a cabo, entre otras tareas... por ende, los profesores trabajan las ocho horas diarias que cualquier empleado lo hace en el país. Que existen docentes mediocres, sí, en cualquier campo de acción hay profesionales inútiles que se la ganan de "ojo".

El Gobierno aceptó la propuesta del 10 por cientos y empezaron con el diseño de la implementación, pero los educadores la rechazaron, porque estaba ligada a la aprobación de la reforma constitucional que designa el presupuesto de Educación. Entonces, Gina María, decidió retirar tan "benéfica" propuesta y retó a los docentes del país. Y ella que de pelea de gallos, no sabe nada.

¿Los docentes quieren o no ser evaluados por competencias?

Gina María sigue mintiéndole al país a través del set, dice que los profesores no quieren evaluación, eso es falso, sobre todo cuando desde mucho antes de ingresar a laborar con el Estado, deben hacerlo a través de concurso de méritos, pero esto no lo sabe Parody, porque ella asciende a sus cargos por obra y gracia del espíritu Santos. Los docentes para empezar a trabajar en su labor concursan, compiten y son evaluados entre miles de profesionales de diferentes áreas, solo los mejores y algunos infiltrados, ingresan, por eso es que están a favor de la evaluación.
"Los maestros no piden la eliminación de la evaluación, exigen una que no tenga fines fiscales, sino que sea diagnóstica y verdaderamente, mejore la calidad. Lo que pasa es que los medios nos muestran las cosas como al Gobierno le conviene", explicó Laura Catalina Monsalve Pérez, docente en paro. 
Al año de inicio de labores, se implementa la evaluación de periodo de prueba, y si se gana, se realiza el respectivo nombramiento. A partir de este momento, los educadores son evaluados en las instituciones educativas por los rectores y coordinadores, evidenciando la necesidad de planeación, proyectos, trabajos de aula, entre otros; esa evaluación se denomina EVALUACIÓN DE DESEMPEÑO, y los docentes la apoyan como una herramienta pedagógica de mejoramiento. Sin embargo, lo inaceptable por parte de los profesores es la EVALUACIÓN DE COMPETENCIAS para poder ascender profesionalmente, en primer lugar, son los únicos empleados del Estado que son evaluados con una prueba escrita, muy ambigua, en la que todas las respuestas pueden ser válidas.

Hasta este punto, puede verse normal, porque hasta en las mejores familias, en las más exquisitas empresas, evalúan. Sin embargo, para los profesores es más complejo, porque la famosa evaluación solo permite que el 20 por ciento de los educadores que la presentan, la ganen, ¿Obra de quién? ¡No se sabe! Pero quizás sea gracias a la fórmula matemática llamada campana de Gauss. La prueba se supera con 80 puntos y, casualmente, muy casualmente, varios docentes quedan con 79 puntos, algunos con 79,999. Por esta razón, la Federación pidió que se elimine este requisito como una de las condiciones de ascenso en el escalafón, pues la evaluación está atada al presupuesto anual del Ministerio y, por tanto, los cupos son muy limitados. 

¿Qué ocurre con la Salud de los profesores?

Según el Gobierno, los docentes tienen un régimen excepcional de salud, con condiciones óptimas y privilegiadas, pero que en la práctica es tan malo como el Presidente Santos, porque al único colombiano que atendieron en menos de dos días y lo operaron de cáncer de próstata el mismo día en el que se lo diagnosticaron, fue a Juan Manuel, es más, fue un récord guinness para la Salud en este país, el tiempo y la agilidad con que fue atendido Santos. Pero, los verdaderos padres de la Patria, los maestros, han muerto esperando a que se les asigne una cita con especialistas, la misma que puede durar seis meses en ser programada, también fallecen esperando a que les autoricen un medicamento o que se les practique cualquier procedimiento quirúrgico.

Gina María reconoce que la prestación del servicio de Salud es deficiente, porque hay corrupción, pero tampoco ha hecho nada para corregir ese problema en lo que lleva de Ministra.

¿Que más piden los maestros?

Que la Educación Pública Preescolar sea de tres grados y no de uno, para que los niños tengan una mejor preparación académica inicial. La única ciudad de Colombia que cuenta con tres grados de preescolar es Bogotá. Con el proyecto de Gustavo Petro y su Bogotá Humana de primera infancia, se han creado cientos de empleos para docentes, directivos docentes, vigilantes, aseadores, cocineras, entre otros. La Educación Preescolar no está incluida en el Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno Nacional.

En fin, hay aciertos y desaciertos en este paro de profesores, mientras no le demos seriedad a la Educación, en Colombia habrán fuertes brechas, incorregibles, y el futuro de la sociedad, estará mal educado. También envío un "regaño" a los docentes, porque los estudiantes se están graduando de bachillerato muy mal preparados, llegan a las universidades con grandes vacíos, unos no saben escribir, otros se destacan por su pésima ortografía y la formación matemática y lógica, ha muerto.

Quiero terminar este artículo con una fragmento de uno, escrito por nuestro honorable presidente de la República de Colombia.

“Mientras el país se mantenga indiferente frente a la suerte de quienes tienen la inmensa responsabilidad de educar a nuestros niños, nunca saldremos adelante. La gran mayoría de los maestros en Colombia tiene que acudir al rebusque para complementar sus ingresos. Sería bueno que los medios se concentraran en investigar y denunciar la verdadera y muy lamentable situación de la gran mayoría de los maestros. Para no ir más lejos, con 26 años de trabajo para llegar al tope del escalafón (grado 14) y después de sacar todos los títulos que se necesitan, un maestro acaba ganando menos que una secretaria recién ingresada a Ecopetrol. Eso no sólo es injusto sino torpe, y demuestra cómo tenemos de equivocadas las prioridades en este país”, escribió Juan Manuel Santos Calderón, presidente de Colombia; el viernes 3 de marzo del 2000 en las páginas editoriales de El Tiempo.